Liebe Hildegard, ich kann es nicht verstehen. Du sollst einfach nicht mehr da sein. Wir zwei haben viele Jahre gerne zusammen gearbeitet. Unfassbar traurig denke ich an Dich. Angelika

A nuestra querida “Oma”, Todavía no podemos creer que te hayas ido, recordamos con mucho cariño todos los momentos compartidos, tu contagiosa alegría y buen humor. Hilder, te echaremos mucho de menos, aunque sabemos que siempre estarás con nosotros. Cuídanos desde el cielo.

Hildergard, te escribimos estas pocas líneas con todo el dolor que no podemos expresar. El Señor te ha llamado antes, sin duda, celoso de la alegría que nos brindabas. Ahora te toca a ti protegernos, ayúdanos a ser mejores, cada día. Nuestra familia te envía sus más cariñosos recuerdos, a la espera de vernos cuando Dios quiera. Nunca te olvidaremos.

In Memoriam